La derecha chilena consideró eliminar permanentemente la democracia en Chile con su Constitución y no lo hicieron porque no les convenía. No son sorpresa, en este contexto, sus viejos y documentados vínculos (bastante frescos desde la perspectiva histórica) con el fascismo y el nazismo (como se reporta aquí y aquí, entre otras fuentes, a propósito de sus vínculos nazis en dictadura y su antigua adherencia al fascismo europeo).

El año pasado pasó relativamente piola cuando salió un señor Raul Bertelsen hablando en los medios defendiendo la Constitución de los milicos. Digo pasó relativamente piola porque este tipo (arriba a la derecha en la foto), que además presidió el Tribunal Constitucional en democracia, participó de la comisión que hizo esa Constitución y propuso directamente que NO hubiera democracia en Chile (así es, tal cual), sino que el presidente fuera elegido por un «comité de hombres buenos». Claro que no es el único que piensa así además. Esta es la clase de gente que a menudo destaca en el Retraso. Sergio Melnick, otro de ellos y otrora ministro de Pinochet, declaraba para el plebiscito del 88 que «votar es una cobardía», que la democracia era básicamente un fiasco pues la gente es tonta («prefiero que las masas no se expresen», decía, puntualizando que «son ignorantes»). Claro, tonta a entender de gente super inteligente, como él, aficionada a la numerología y a hacer presentaciones de powerpoint impresentables de ordinarias como las que hizo para Codelco por millones de pesos.

Sergio Melnick, ex ministro de la dictadura y personaje de oscuras vinculaciones (amigo del torturador y verdugo Álvaro Corbalán). Hoy (era que no) militante del Rechazo.

Jaime Guzmán se convenció de que el Estado de Chile tenía que tener una forma democrática en el papel al menos para que pudiera aspirar a ser legítima y duradera, pero todos estaban de acuerdo en que tenían que construirla para «minimizar los defectos y males del sufragio [voto] universal». Jaime Guzmán, declarado admirador del dictador fascista español Francisco Franco (aliado conocido de Hitler) igual que la doctora Cordero, en su correspondencia comentaba lo que le perturbaba que el voto fuera igualitario, pues en efecto para él el voto de su nana o un trabajador cualquiera no vale como el de la doctora o como la de él mismo, como Bertelsen y el «comité de hombres buenos» que al final no quisieron hacer porque no era tan conveniente. para ser justos, Guzmán consideraba que resultaría impráctico y/o injusto, en el proceso, limitar el voto por razones como estas u otras; la democracia quedaba así para él como lo menos malo. Bajo la premisa de que además ya no era políticamente viable revertirlo; ya no había vuelta atrás con el voto universal pues -según él mismo- éste es premisa básica de la democracia liberal moderna desde la Revolución Francesa.

La Constitución estaba hecha poco menos para asegurar el poder de gente como ellos, pretendidos superiores a nosotros, elegidos por Dios para gobernar, aunque esto por fuerza tuviera que mantener al menos el voto universal (y por lo tanto con otras limitaciones o trampas hechas para bloquear la influencia de las mayorías). Hasta 2005 una parte gigante del senado eran designados, con lo cual lo controlaba todo la derecha e incluyó varios años a Pinochet mismo como senador «VITALICIO» (nada menos). Luego de eso, aun así, quedaron los amarres del modelo neoliberal que tienen todo privatizado y mercantilizado con la gente empobrecida, los salarios estancados, sin derecho a atención digna si no puedes pagarla aunque te saques la cresta toda la vida, con gente muriendo en lista de espera, con abuelos suicidándose en la miseria porque no quieren «ser una carga», con cientos, miles de muertes en el SENAME a menudo en oscuras circunstancias.

La comisión Ortuzar que hizo la Constitución con Bertelsen y Guzmán se preocupó explícitamente de que tu NO pudieras demandar al Estado porque este no hiciera efectivo tu derecho a la salud (para que el Estado construyera hospitales o escuelas donde no hay por ejemplo) aunque este fuera consagrado en el papel de esa misma Constitución (específicamente, se ocuparon de que los recursos de tutelaje o protección no cubrieran estos derechos). Las Isapres han sido enjuiciadas literalmente más de UN MILLÓN DE VECES por vulnerar los derechos constitucionales de sus afiliados con alzas unilaterales sin que nadie los parara de manera efectiva, y los empresarios presionaron para que el Tribunal Constitucional impidiera la ley que hiciera del SERNAC capaz de realmente proteger al consumidor con mayores facultades y en desmedro de la persona común, de las personas esforzadas y trabajadoras y en favor los abusadores.

Contra eso votamos este 5 de Septiembre. Contra un país clasista, anti popular y anti democrático, uno machista y racista (que vive aún del despojo aunque se llenen la boca en la derecha con la propiedad privada). Por construir uno donde no dejemos a nadie atrás. Te invitamos a participar, movilizarte en redes y en los territorios, a comentar, informar, a votar. Por nuestros abuelos e hijos, por nuestros pueblos, por vivir en una relación responsable y armónica con nuestro entorno y aspirar a siquiera tener un futuro aquí. Por los enfermos, por los que se sacan la cresta para sobrevivir y dar un futuro a sus niños con tanta dificultad o a duras penas. Por tí, por mí, por nosotros. Por la libertad.

Más info:

▶ Revisa la Guía/síntesis completa del nuevo proyecto constitucional para Chile aquí (proyecto final; audiolibro)

▶ Resumen y comentario de libertades y derechos en la nueva Constitución por parte del ex convencional, académico constitucionalista y doctor en derecho Jaime Bassa para Hora Constituyente vía La voz de los que sobran

▶ Apruebo con reforma: un manifiesto. Breve síntesis y defensa del proyecto por parte del académico constitucionalista de centro-derecha, también doctor en derecho, José Francisco García para The Clinic