LA FALSA TECNOCRACIA (o de cómo sacar la pelota de la cancha: no discutir una nueva idea de país, sino cuÔnto cuesta su implementación)

El reciente 28 de julio de 2022 un grupo de economistas de derecha (centro-derecha se dirían a sí mismos) publicaron un documento denominado Estimaciones del Costo Fiscal Directo de la Propuesta de Nueva Constitución.

Parten ensayando una instalación recurrente en el conservadurismo, lo presentan como un trabajo acadĆ©mico, puro, tĆ©cnico, sin inclinación ideológica alguna, sólo en un afĆ”n colaborativo, ya que, segĆŗn ellos, sus estimaciones ā€œpermiten identificar los elementos fiscalmente mĆ”s costosos, lo que podrĆ­a permitir a las autoridades tener información para graduar la puesta en marcha del texto segĆŗn se consigan los recursos financieros. TambiĆ©n este trabajo puede ayudar en el diseƱo de las leyes de implementación y transición e incluso en la eventual decisión de postergar algunas reformasā€.

Su falsa asepsia ideológica se deja ver ya en el planteamiento de sus objetivos. En efecto, plantean que el objetivo central es lograr una estimación de costo fiscal incremental directo de la NC, pero en el pĆ”rrafo siguiente seƱalan: ā€œNuestra motivación es doble. Por un lado, buscamos proporcionar información de utilidad para personas que requieren mĆ”s elementos a la hora de decidir su votoā€. Todo esto cuando terminan concluyendo que el costo fiscal directo que subyace a la implementación de la NC, es entre 8,9 y 14,2 puntos del PIB. Dicho en simple, si juntamos objetivos y conclusiones, estĆ”n entregando información no para un voto informado, sino como acción de propaganda del rechazo, ya que ademĆ”s sus autores comentan que esto podrĆ­a significar algo mĆ”s de 3 veces la reforma tributaria en discusión, insinuando una suerte de inviabilidad económica del proyecto de NC. Veamos algunos de sus sesgos:

  • La base de referencia para el cĆ”lculo del costo incremental es el gasto que hoy se realiza en el Ć”mbito respectivo. Es decir, trabaja con el supuesto que en el escenario alternativo (triunfo del rechazo), no existirĆ” gasto incremental alguno asociado a polĆ­ticas pĆŗblicas relacionadas a derechos sociales de los que se hace cargo la NC.
  • En el anĆ”lisis comparado con seis paĆ­ses que pasaron por sustituciones constitucionales, se toma una serie de tiempo calculando el promedio de 10 aƱos antes del cambio constitucional y el promedio de los 10 aƱos posteriores. Lo que claramente induce a error en las conclusiones, ya que aquĆ­ sólo se puede observar, en general promedios muy superiores en el periodo post NCs, sin embargo, este anĆ”lisis no considera, deliberadamente a mi juicio, lo que muestran las respectivas tendencias del gasto. Los cambios constitucionales suelen emerger de crisis del sistema polĆ­tico y expansión de las demandas de la sociedad civil, sobre el mismo sistema polĆ­tico, sobre derechos sociales, sobre derechos fundamentales. Por lo tanto, la tendencia de incremento en el gasto pĆŗblico comienza antes de la NC y, esta misma, es el resultado de una demanda que termina siendo ineludible para los sectores dominantes.
  • Aunque lo que se declara es buscar entregar elementos para un voto informado, sólo se analiza (en costo fiscal directo) una de las alternativas, nada se dice de los escenarios alternativos, incurriendo en un marcado sesgo de información. ĀæQuĆ© paĆ­s resulta de la opción rechazo?, ĀæcuĆ”les son las alternativas que se abren?, Āæno es posible, con supuestos igualmente vĆ”lidos, simular escenarios fiscales?
  • Finalmente, y no menos importante, es reflexionar sobre el costo de la constitución vigente (C 80), pero ir incluso mĆ”s allĆ” del reduccionismo economicista del costo fiscal directo como Ćŗnica variable de medición. Es esa constitución la que posibilitó niveles obscenos de concentración del ingreso, la que privatizó derechos sociales, la que creo las ā€œpulperĆ­asā€ de las AFP (administran los recursos de trabajadores y trabajadoras, para ir al mercado de capitales y endeudar a los mismos aportantes que pagan intereses por los recursos que le son propios), la constitución que creo los chile paralelos (los mismos que se oponen a la plurinacionalidad como reconocimiento mĆ­nimo a los pueblos originarios, Ā pero que crearon una plurinacionalidad económica, de clase). ĀæCuĆ”l ha sido el costo de un sistema polĆ­tico y económico impuesto a sangre y fuego? No les sirve el PIB ni la contabilidad nacional para medir el Chile neoliberal de los Ćŗltimos 40 aƱos, asĆ­ que no lo miden, para ellos es mejor que no exista.

     

    Cuando saquen bien la cuenta, sin trampa, hablamos, hasta tanto ”APRUEBO!

     

     

    Patricio Soto Caramori